septiembre 19, 2024

Crece demanda por el GNV ante la crisis de carburantes en Tarija

El reciente desabastecimiento de carburantes, particularmente de diésel, ha provocado una mayor demanda por la conversión de vehículos a Gas Natural Vehicular (GNV) en el departamento de Tarija. Desde el autotransporte se abren a poder dar este salto, sin embargo, refieren que un lío judicial actualmente está perjudicando al sector. Por otro lado, la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), señala que el gas está garantizado y que se han intensificado los esfuerzos para normalizar el suministro de los demás combustibles.

Creciente demanda

Según José Navarro, director del Programa GNV de la Gobernación, en las últimas dos semanas hubo un aumento significativo en las solicitudes de reconversión, tanto por parte de particulares como del sector del transporte público. Refirió que si antes solían atenderse cinco solicitudes, ahora son 30.

Navarro informó que, debido a la escasez de diésel, el Programa GNV ha experimentado un aumento en la afluencia de transportistas que buscan la reposición y recalificación de sus vehículos para utilizar GNV.

Este crecimiento en la demanda ha llevado a que el presupuesto asignado para el programa esté cerca de agotarse. Según las proyecciones que manejan, es que ejecutarán el 100% de los recursos hasta finales de agosto.

Por ello ha solicitado al gobernador Oscar Montes una inyección de recursos a través del Fondo Rotatorio, que son propios. Para este año el Fondo es de 16 millones de bolivianos y hasta la fecha ya ha recuperado unos 10 millones, que han retornado a las arcas del Programa GNV.

“Tenemos la posibilidad de continuar recuperando, ya no dependemos de los agentes de pensión como lo eran antes Emtagas y YPFB, que nos descontaban a nosotros el 16%, que es 13% IVA y 3% IT. Hoy recibimos directamente de las estaciones y estamos recuperando arriba de un millón de bolivianos mensual, lo cual ayuda a que el Fondo Rotatorio pueda hacer estas clasificaciones”, apuntó.

Los costos de reconversión a GNV varían según la tecnología y el tipo de vehículo. Para vehículos de tercera generación, el costo se sitúa entre 800 y 900 dólares; para la quinta generación, oscila entre 1.400 y 1.600 dólares. En el caso de los micros, la reconversión a tercera generación tiene un costo de 1.800 a 2.000 dólares.

“El tema del Fondo Rotatorio, una vez que nosotros damos al beneficiario, en este caso al que tiene la movilidad, lo único que tienen que hacer ellos, es hacer uso, ir a las estaciones de servicio, consumir los metros cúbicos que necesita su movilidad y por cada metro cúbico que es consumido por estos beneficiarios, la estación de servicio nos da a nosotros 0,20 centavos por cada metro cúbico del beneficiario que tenemos, esto sale de la diferencia de la compra de la estación de servicio, de lo que compra al distribuidor y lo que vende hacia el beneficiario”, explicó.

El transporte

Gabriel Pérez, ejecutivo de la Federación del Autotransporte 15 de Abril, manifestó la persistente preocupación entre los transportistas, especialmente entre los conductores de micros, quienes continúan enfrentando largas filas para obtener diésel.

Pérez indicó que, aunque la idea de reconvertir sus vehículos a GNV es atractiva, existe una limitante, ya que cerca de 200 motores que pertenecen a la Gobernación están paralizados debido a un conflicto jurídico con la empresa proveedora, que no cumplió con los términos del contrato.

Pérez asegura que la reconversión de estos 200 motores beneficiaría no solo a los transportistas, sino también a la economía regional, ya que representaría un ahorro significativo para el Gobierno, al disminuir la demanda de diésel subvencionado. La posibilidad de que estos motorizados pasen a usar GNV, en lugar de diésel, es vista como una solución para reducir costos y mejorar la eficiencia del transporte público.

GNV garantizado

Franz Rodríguez, director de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), aseguró que el suministro de GNV está garantizado y que no ha habido escasez en ningún momento.

En cuanto al diésel y la gasolina, mencionó que la situación está volviendo a la normalidad. “Estamos distribuyendo 160.000 litros de diésel y 190.000 litros de gasolina al día”, informó.

Para hacer frente al reciente desabastecimiento, la ANH incrementó la distribución de diésel en 50.000 litros adicionales por semana. Esto significa que estaciones de servicio que antes recibían 20.000 litros ahora están recibiendo 25.000 litros. Según Rodríguez, el consumo mensual promedio en el departamento es de 8,3 millones de litros de gasolina y 10 millones de litros de diésel.

En el caso del GNV, el consumo mensual en el municipio de Cercado alcanza los 3,2 millones de metros cúbicos, mientras que el consumo de GLP (Gas Licuado de Petróleo) es de 1.240.000 kilogramos.

El País